La ayuda incluye materiales destinados a cubrir las enormes necesidades que tienen las más de 180.000 personas que, desde hace 44 años, malviven en la parte más inhóspita del desierto argelino.
Los camiones incluyen más de 23 toneladas de alimentos, y dos toneladas más con destino a la Unidad de Celiaquía de los campamentos, patología muy difícil de tratar debido a la escasez.